A Rajoy le tiemblan las piernas con Murcia. Quien puede, ya le ha informado del alcance de la que se avecina en una región criminalizada, supuestamente por y desde su partido. La confianza de Génova 13 en Valcárcel ahora es cero. Les ha estado engañando vilmente y Juan Costa ha pedido al líder depurar a fondo la propuesta de candidaturas que llegue desde Murcia. Mal, muy mal lo tienen los de siempre aunque amenacen a la dirección nacional con tirar, no se sabe bien de qué manta.
Mirarlas con lupa es poco. El economista Martínez Pujalte ha informado discretamente al coordinador electoral, y amigo, del enorme riesgo político que aquí se corre con determinados nombres, como Ayala, Garre, la gallega Barreiro, o el ex alcalde de San Pedro del Pinatar. No en vano, viaja constantemente a la Región desde el verano y hasta se deja ver en actos públicos para desesperación de algunos. Su misión está clara y el premio a su esfuerzo, titánico, arriesgado e impagable por la democracia, será volver a incluirlo en una lista aunque sea por Albacete. El incidente con Manuel Marín ya no le computa en contra. Así lo ha purgado bien.
Las investigaciones de la UCO han trascendido en parte desde el Ministerio del Interior al propio Rajoy, ex ministro, que ya sabe lo que hay. Las mentiras pueriles de Valcárcel ya no convencen a nadie en Génova 13, y desde allí se trata ahora de salvar los muebles confeccionando unas listas a la medida y acorde con la muy delicada situación creada. Los ha puesto en un aprieto en el peor momento.
Fuera la extrema derecha murciana, para empezar. ¿Volveremos a ver a Peñarrubia aunque sea el ideólogo de la medalla y visita de Aznar a Lorca para así presionar a Génova 13 en un momento estratégico para este senador y ex diputado? Se le ve ahora más, de nuevo, trabajando con Eusebio Abellán, su socio profesional desde hace muchos años en un despacho lorquino.
Un incólume Bermejo les da pánico en campaña electoral permanente por la Región de Murcia, con un tercio de los alcaldes del PP pendientes de comparecer ante los jueces como presuntos delincuentes. Eso es una bomba de relojería, sino de racimo, que puede estallar en cualquier momento antes de la última oportunidad de su vida política para Rajoy; hijo de juez, para quien lo haya olvidado.
Además, Valcárcel se ha burlado de sus "cooperadores necesarios" al hacerles creer que, como diputados autonómicos, quedaban a resguardo de todo y, además, alguno incluso podría aspirar pronto a ser su "delfín" si él dimitía para ser, a renglón seguido, senador elegido por la Asamblea Regional.
Desde Madrid les seguiría protegiendo con una creciente influencia porque hasta podría ser el próximo candidato del PP a la Presidencia del Gobierno tras el fracaso de Rajoy, que nuestro presidente apunta en privado como seguro. Al menos, como hemos visto ya, dos paletos políticos le creyeron y se pusieron a recaudar "para el partido" (?).
Costa es inflexible y Rajoy está a lo que diga ahora este preclaro ex ministro castellonense, que mira por encima del hombro a un tipo tan histriónico como Valcárcel. El candidato nacional del PP se puede estar jugando en Murcia el ser o no ser después del 9 de marzo, según sus propios expertos, quienes le apresuran a tomar distancia y actuar con contundencia y resolución en esta situación. De momento, las decisiones políticas sobre Morales y Martínez Andreo se toman en Madrid.
El "tema Murcia" ya está, pues, en manos del comité electoral nacional y poco más tiene que decir Valcárcel después de su errónea estrategia de dudar públicamente de la profesionalidad e independencia de las Fuerzas de Seguridad del Estado y del Poder Judicial, que lo viene volteando en el "caso Zerrichera" y en la "Operación Tótem", con continuados pronunciamientos jurídicos adversos de la Audiencia Provincial de Murcia.
Los jueces murcianos están dando la talla contra la corrupción y los UCO han demostrado una gran pulcritud y mejor asesoramiento legal a la hora de actuar. Son un cuerpo de élite, pensado y diseñado para actuar contra corruptos. Están inflexibles y rebosantes de moral tras su debut en Totana. No pueden errar por su propia credibilidad y prestigio de cara a la siguiente operación.
Rajoy e Interior, al menos, ya tienen claro de que aquí se ha producido una presunta conspiración para el delito a gran escala después de escoger a los candidatos políticos por peones idóneos en cada lugar a esquilmar. Sánchez Carrillo era el encargado formal de esa misión por orden directa de "míster V" que, a lo mejor, no es quien la mayoría puede pensar que es. Luego, Valcárcel ha sido el responsable político directo de confeccionar la lista de candidatos a la Asamblea Regional.
El presidente, según parece, se ha puesto en manos de un prestigioso bufete penalista madrileño desde hace ya algún tiempo por si acaso tuviese que defenderse en breve de algunas acusaciones. No cesa de esgrimir que él no ha firmado nada, ni siquiera respecto a la balsa Yeni.
En cualquier caso, se sigue tirando por elevación en busca de pruebas que incriminen al propio presidente de la Comunidad Autónoma por dar una supuesta cobertura política continuada a un atajo de presuntos delincuentes de su guardia pretoriana, como Morales ó Sánchez.
Su nombre ha salido y está en las investigaciones de la UCO, como el de algunos consejeros y ex consejeros, prestigiosos abogados, empresarios de nuevo cuño, periodistas intermediarios, financieros ahora desesperados, profesionales codiciosos y políticos de pueblo. La pirámide apunta a ser amplia, y la trama externa nada desdeñable. La UCO tiene ya todos los nombres, sin excepciones, gracias a una discreta colaboración ciudadana y de militantes del propio PP.
Alguna deserción en la trama, buscando el beneficio penal para el arrepentido, puede precipitar alguna dimisión política sonada antes de lo previsto. Atención al piso de la Gran Vía y a José Hernández, ex alcalde presuntamente corrupto de San Javier. Por ahí se va a romper primero la cuerda si es que Morales -¿dóndé pasará la Nochebuena?- no ha "cantado" ya para salvar en parte su pellejo. Sus dos mujeres no han resistido ni el primer interrogatorio, tal como se intuye por el desarrollo visible de los acontecimientos.
Es muy sospechoso que los jueces se estén tomando tanto tiempo después de que Valcárcel, como ha hecho con Juan Ramírez, alcalde de Águilas, haya dejado tirado y a su propia suerte, al ex alcalde de Totana y todavía diputado regional. Para el presunto Ramírez no procuró ni el aforamiento por resistirse a dejar de ser candidato a la alcaldía en medio de advertencias de tirar del hilo en caso contrario. El presidente tuvo que ceder.
Abogados, financieros, aparejadores, periodistas... están en la presunta trama criminal que se viene investigando desde hace meses, incluso por determinadas fuerzas policiales desde la provincia de Alicante, cuando el Estado se dispone a extirpar con urgencia ese supuesto tumor social comenzando por Totana, Puerto Lumbreras, Águilas, Torre Pacheco, Fuente Álamo, San Javier... aunque sea en plena campaña electoral, hasta llegar a los aledaños de "míster V". Habrá muchas más detenciones a la vuelta de Reyes y carbón para los más malos: los que tiran la piedra y esconden la mano.
No parará en "mister V" porque detrás se encontrarían, según parece, dos viejos mafiosos con un historial que haría vomitar al mismísimo Rodríguez Zapatero de conocerlo en toda su extensión y profundidad porque el rastro hasta conduce a manos probablemente manchadas de sangre, muy al fondo en el tiempo. Ese extremo podría estar documentado, según algunas fuentes conocedoras de los hechos.
Parecen ser ambos los autores intelectuales de la supuesta trama aunque los alfiles y peones serían los que pudieran haber dado más la cara a cambio de forrarse con el patrimonio común de todos los murcianos, a tenor de los tipos penales, suficientes y sólidos, que va arrojando la investigación, con pruebas palpables e irrefutables sobre la mesa, y que asume la instrucción judicial además de Génova 13.
Anticorrupción también está en marcha y ya vemos que estar aforado por pertenecer a la Asamblea Regional de Murcia es poco más que nada. Ahí está el ejemplo de Juan Morales para que otros vean la que les espera cuando la maquinaria judicial llame a su puerta, llegado el caso.
Faltaba don Trinitario largando ante policías, fiscales y jueces sobre el peaje múltiple que tuvo que pagar por una expectativa que los receptores sabían de antemano que no podían cumplir legalmente. Lo engañaron y, a las primeras de cambio, le dijeron que "si te he visto, no me acuerdo...especulador".
Trinitario iba por libre, no era de la misma escalada de los elegidos y, además, les hacía la competencia. Ahora su venganza será terrible para débiles y cobardes. Es el principal testigo de cargo. No hay escapatoria posible, según los investigadores. Ya ha delatado a "míster V".
Y ya es casualidad que todo esto le pille en Murcia al propio ministro de Justicia. El ojo del Estado y la igualdad de todos los españoles ante la Ley es una mala combinación espacial para los delincuentes de cuello blanco en los tiempos tan difíciles que corren para muchos ciudadanos honrados.
Han dejado esos elegidos demasiadas pistas por un exceso de confianza... política aunque no por falta de costumbre en codiciar lo ajeno. Pura cleptocracia ha resultado el valcarcelato.
Mirarlas con lupa es poco. El economista Martínez Pujalte ha informado discretamente al coordinador electoral, y amigo, del enorme riesgo político que aquí se corre con determinados nombres, como Ayala, Garre, la gallega Barreiro, o el ex alcalde de San Pedro del Pinatar. No en vano, viaja constantemente a la Región desde el verano y hasta se deja ver en actos públicos para desesperación de algunos. Su misión está clara y el premio a su esfuerzo, titánico, arriesgado e impagable por la democracia, será volver a incluirlo en una lista aunque sea por Albacete. El incidente con Manuel Marín ya no le computa en contra. Así lo ha purgado bien.
Las investigaciones de la UCO han trascendido en parte desde el Ministerio del Interior al propio Rajoy, ex ministro, que ya sabe lo que hay. Las mentiras pueriles de Valcárcel ya no convencen a nadie en Génova 13, y desde allí se trata ahora de salvar los muebles confeccionando unas listas a la medida y acorde con la muy delicada situación creada. Los ha puesto en un aprieto en el peor momento.
Fuera la extrema derecha murciana, para empezar. ¿Volveremos a ver a Peñarrubia aunque sea el ideólogo de la medalla y visita de Aznar a Lorca para así presionar a Génova 13 en un momento estratégico para este senador y ex diputado? Se le ve ahora más, de nuevo, trabajando con Eusebio Abellán, su socio profesional desde hace muchos años en un despacho lorquino.
Un incólume Bermejo les da pánico en campaña electoral permanente por la Región de Murcia, con un tercio de los alcaldes del PP pendientes de comparecer ante los jueces como presuntos delincuentes. Eso es una bomba de relojería, sino de racimo, que puede estallar en cualquier momento antes de la última oportunidad de su vida política para Rajoy; hijo de juez, para quien lo haya olvidado.
Además, Valcárcel se ha burlado de sus "cooperadores necesarios" al hacerles creer que, como diputados autonómicos, quedaban a resguardo de todo y, además, alguno incluso podría aspirar pronto a ser su "delfín" si él dimitía para ser, a renglón seguido, senador elegido por la Asamblea Regional.
Desde Madrid les seguiría protegiendo con una creciente influencia porque hasta podría ser el próximo candidato del PP a la Presidencia del Gobierno tras el fracaso de Rajoy, que nuestro presidente apunta en privado como seguro. Al menos, como hemos visto ya, dos paletos políticos le creyeron y se pusieron a recaudar "para el partido" (?).
Costa es inflexible y Rajoy está a lo que diga ahora este preclaro ex ministro castellonense, que mira por encima del hombro a un tipo tan histriónico como Valcárcel. El candidato nacional del PP se puede estar jugando en Murcia el ser o no ser después del 9 de marzo, según sus propios expertos, quienes le apresuran a tomar distancia y actuar con contundencia y resolución en esta situación. De momento, las decisiones políticas sobre Morales y Martínez Andreo se toman en Madrid.
El "tema Murcia" ya está, pues, en manos del comité electoral nacional y poco más tiene que decir Valcárcel después de su errónea estrategia de dudar públicamente de la profesionalidad e independencia de las Fuerzas de Seguridad del Estado y del Poder Judicial, que lo viene volteando en el "caso Zerrichera" y en la "Operación Tótem", con continuados pronunciamientos jurídicos adversos de la Audiencia Provincial de Murcia.
Los jueces murcianos están dando la talla contra la corrupción y los UCO han demostrado una gran pulcritud y mejor asesoramiento legal a la hora de actuar. Son un cuerpo de élite, pensado y diseñado para actuar contra corruptos. Están inflexibles y rebosantes de moral tras su debut en Totana. No pueden errar por su propia credibilidad y prestigio de cara a la siguiente operación.
Rajoy e Interior, al menos, ya tienen claro de que aquí se ha producido una presunta conspiración para el delito a gran escala después de escoger a los candidatos políticos por peones idóneos en cada lugar a esquilmar. Sánchez Carrillo era el encargado formal de esa misión por orden directa de "míster V" que, a lo mejor, no es quien la mayoría puede pensar que es. Luego, Valcárcel ha sido el responsable político directo de confeccionar la lista de candidatos a la Asamblea Regional.
El presidente, según parece, se ha puesto en manos de un prestigioso bufete penalista madrileño desde hace ya algún tiempo por si acaso tuviese que defenderse en breve de algunas acusaciones. No cesa de esgrimir que él no ha firmado nada, ni siquiera respecto a la balsa Yeni.
En cualquier caso, se sigue tirando por elevación en busca de pruebas que incriminen al propio presidente de la Comunidad Autónoma por dar una supuesta cobertura política continuada a un atajo de presuntos delincuentes de su guardia pretoriana, como Morales ó Sánchez.
Su nombre ha salido y está en las investigaciones de la UCO, como el de algunos consejeros y ex consejeros, prestigiosos abogados, empresarios de nuevo cuño, periodistas intermediarios, financieros ahora desesperados, profesionales codiciosos y políticos de pueblo. La pirámide apunta a ser amplia, y la trama externa nada desdeñable. La UCO tiene ya todos los nombres, sin excepciones, gracias a una discreta colaboración ciudadana y de militantes del propio PP.
Alguna deserción en la trama, buscando el beneficio penal para el arrepentido, puede precipitar alguna dimisión política sonada antes de lo previsto. Atención al piso de la Gran Vía y a José Hernández, ex alcalde presuntamente corrupto de San Javier. Por ahí se va a romper primero la cuerda si es que Morales -¿dóndé pasará la Nochebuena?- no ha "cantado" ya para salvar en parte su pellejo. Sus dos mujeres no han resistido ni el primer interrogatorio, tal como se intuye por el desarrollo visible de los acontecimientos.
Es muy sospechoso que los jueces se estén tomando tanto tiempo después de que Valcárcel, como ha hecho con Juan Ramírez, alcalde de Águilas, haya dejado tirado y a su propia suerte, al ex alcalde de Totana y todavía diputado regional. Para el presunto Ramírez no procuró ni el aforamiento por resistirse a dejar de ser candidato a la alcaldía en medio de advertencias de tirar del hilo en caso contrario. El presidente tuvo que ceder.
Abogados, financieros, aparejadores, periodistas... están en la presunta trama criminal que se viene investigando desde hace meses, incluso por determinadas fuerzas policiales desde la provincia de Alicante, cuando el Estado se dispone a extirpar con urgencia ese supuesto tumor social comenzando por Totana, Puerto Lumbreras, Águilas, Torre Pacheco, Fuente Álamo, San Javier... aunque sea en plena campaña electoral, hasta llegar a los aledaños de "míster V". Habrá muchas más detenciones a la vuelta de Reyes y carbón para los más malos: los que tiran la piedra y esconden la mano.
No parará en "mister V" porque detrás se encontrarían, según parece, dos viejos mafiosos con un historial que haría vomitar al mismísimo Rodríguez Zapatero de conocerlo en toda su extensión y profundidad porque el rastro hasta conduce a manos probablemente manchadas de sangre, muy al fondo en el tiempo. Ese extremo podría estar documentado, según algunas fuentes conocedoras de los hechos.
Parecen ser ambos los autores intelectuales de la supuesta trama aunque los alfiles y peones serían los que pudieran haber dado más la cara a cambio de forrarse con el patrimonio común de todos los murcianos, a tenor de los tipos penales, suficientes y sólidos, que va arrojando la investigación, con pruebas palpables e irrefutables sobre la mesa, y que asume la instrucción judicial además de Génova 13.
Anticorrupción también está en marcha y ya vemos que estar aforado por pertenecer a la Asamblea Regional de Murcia es poco más que nada. Ahí está el ejemplo de Juan Morales para que otros vean la que les espera cuando la maquinaria judicial llame a su puerta, llegado el caso.
Faltaba don Trinitario largando ante policías, fiscales y jueces sobre el peaje múltiple que tuvo que pagar por una expectativa que los receptores sabían de antemano que no podían cumplir legalmente. Lo engañaron y, a las primeras de cambio, le dijeron que "si te he visto, no me acuerdo...especulador".
Trinitario iba por libre, no era de la misma escalada de los elegidos y, además, les hacía la competencia. Ahora su venganza será terrible para débiles y cobardes. Es el principal testigo de cargo. No hay escapatoria posible, según los investigadores. Ya ha delatado a "míster V".
Y ya es casualidad que todo esto le pille en Murcia al propio ministro de Justicia. El ojo del Estado y la igualdad de todos los españoles ante la Ley es una mala combinación espacial para los delincuentes de cuello blanco en los tiempos tan difíciles que corren para muchos ciudadanos honrados.
Han dejado esos elegidos demasiadas pistas por un exceso de confianza... política aunque no por falta de costumbre en codiciar lo ajeno. Pura cleptocracia ha resultado el valcarcelato.
