Ramón Ortiz, ex secretario general del PSRM, dos veces candidato a la Presidencia de la Comunidad Autónoma retó a Pedro Saura en un comité regional técnico. Lanzó un órdago a la grande. “Si Saura quiere consultar a las bases que coloque una urna en cada agrupación local para que los militantes decidan sobre su continuidad como secretario general”.
Esta vez los críticos no se escudaron en peones o banderilleros, con la supuesta “plataforma” salieron al albero de uno a uno. Enrique Amat primero, que pidió la palabra y se la concedieron y después Ramón Ortiz. Víctor Meseguer, Alfonso Navarro y el alcalde de Beniel, Roberto García, también acompañaron en la faena. No son críticos, son “antisauruistas”. Todo el problema actual de los socialistas murcianos parece que pasa en su opinión por la sustitución del actual secretario general del PSRM.
Lo de Ramón Ortiz fue calificado de “payasada” por veteranos militantes del partido. Sería comprensible si hubiera pedido primarias. Ya que el ciezano ganó a Martínez Ovejero hace años en esta modalidad, aunque luego perdería las elecciones autonómicas frente a su tocayo Valcárcel. “Porque no colocó la urna cuando se presentó a secretario general”, comentaban secretarios generales de agrupaciones locales.
En “el congreso de la unidad” de los socialistas murcianos se presenta tan dividido como en los viejos tiempos. Hace cuatro años en el Auditorio Regional dijeron que hacían las paces, que se acababan las familias y que el proyecto de la ejecutiva liderada por Saura tenía un recorrido de ocho años. “Me da pena y mucha tristeza, estamos volviendo a los viejos tiempos, no entiendo la propuesta de Ramón”, comentaba la ex presidenta de la Comunidad, María Antonia Martínez.
El alcalde de Calasparra, Jesús Navarro, partidario de cambio de estrategia y de discurso, tampoco entendía el “referéndum” propuesto por Ortiz. “Los estatutos están claros, sí alguien quiere presentarse que lo haga y qué los delegados decidan, lo demás son tonterías”. Las agrupaciones se están empezando a decantar y el “brindis al sol” de Ramón Ortiz gustó mucho sólo a “la cuadrilla” del ciezano. A los indecisos o no alineados lo les hizo precisamente mucha gracia.
La críticos estaban escocidos por la reunión de Alcantarilla. No es lógico que una reunión del secretario general con los máximos dirigentes de las agrupaciones locales margine a aquellos que se han significado en contra de su gestión. Ahí Saura pecó de sectarismo y rehuyó de la integración, según muchos dirigentes regionales. Dicen que fue una respuesta a la “Plataforma Alternativa” del segundo escalón.
Las asambleas locales de final de este mes irán colocando a cada uno en su sitio en cuanto a apoyos. Los “antisauristas” siguen sin encontrar cabeza de cartel. Pedro Saura y su equipo acumula apoyos regionales, porque con los de Madrid ya cuenta. A día de hoy Saura controla holgadamente el partido en Murcia y si no anuncia oficialmente la presentación de su candidatura a la reelección es por estrategia política.
La otra guerra en debate precongresual
La “plataforma” de pasado sábado está pagando los platos rotos de las guerras internas entre los socialistas murcianos de cara al congreso que se iniciara el 18 de julio. Los “retratados”, sin proyecto alternativo, sin líder de recambio a Pedro Saura, se han encontrado con padrinos putativos detrás de la maniobra. En el comité regional todos insistieron que lo suyo es iniciativa propia, que no eran avanzadilla de nadie.
“Yo no soy hombre de Ramón Ortiz, detrás de mi no está Alfonso Navarro”, era respuesta común. Entre los asistentes a la foto del hotel fuentes oficiales del partido informan que tres de los asistentes de Las Torre de Cotillas que se presentaron como concejales, son militantes de base, que ni siquiera iban en la pasada candidatura municipal.
Uno de los portavoces de la plataforma que piden el cambio de Saura como líder regional, es el secretario general de Cartagena-Norte y actual portavoz del grupo municipal socialista en el Ayuntamiento José Luis Martínez y está cuestionado por la agrupación más fuerte en militantes de la ciudad, Cartagena-Sur. Se han recogido más de seiscientas firmas de militantes pidiendo su dimisión.
Fuentes Zorita sigue y González Tovar espera
La continuidad de Fuentes Zorita al frente de la Confederación Hidrográfica del Segura es un uno fijo en todas las quinielas y se confirmará en próximos Consejos de Ministros. La plaza de la Delegación del Gobierno sigue abierta, las posibilidades de la continuidad de Ángel González dicen que son muy escasas. Por el contrario en las apuestas por Rafael González Tovar se cotizan al alza por días. El interesado dice no saber nada y se supone que si lo supiera tampoco lo diría.
Una agrupación de Cartagena ha apostado por María Antonia Matínez, “porque sería una gran delegada del Gobierno”. La ex presidenta de la Comunidad descarta volver a la primera línea de la política. Sigue el proceso congresual de su partido con interés, expresa su apoyo a Pedro Saura para la reeleción y está en contra de los intentos de volver a viejas historias pasadas del PSRM.
Esta vez los críticos no se escudaron en peones o banderilleros, con la supuesta “plataforma” salieron al albero de uno a uno. Enrique Amat primero, que pidió la palabra y se la concedieron y después Ramón Ortiz. Víctor Meseguer, Alfonso Navarro y el alcalde de Beniel, Roberto García, también acompañaron en la faena. No son críticos, son “antisauruistas”. Todo el problema actual de los socialistas murcianos parece que pasa en su opinión por la sustitución del actual secretario general del PSRM.
Lo de Ramón Ortiz fue calificado de “payasada” por veteranos militantes del partido. Sería comprensible si hubiera pedido primarias. Ya que el ciezano ganó a Martínez Ovejero hace años en esta modalidad, aunque luego perdería las elecciones autonómicas frente a su tocayo Valcárcel. “Porque no colocó la urna cuando se presentó a secretario general”, comentaban secretarios generales de agrupaciones locales.
En “el congreso de la unidad” de los socialistas murcianos se presenta tan dividido como en los viejos tiempos. Hace cuatro años en el Auditorio Regional dijeron que hacían las paces, que se acababan las familias y que el proyecto de la ejecutiva liderada por Saura tenía un recorrido de ocho años. “Me da pena y mucha tristeza, estamos volviendo a los viejos tiempos, no entiendo la propuesta de Ramón”, comentaba la ex presidenta de la Comunidad, María Antonia Martínez.
El alcalde de Calasparra, Jesús Navarro, partidario de cambio de estrategia y de discurso, tampoco entendía el “referéndum” propuesto por Ortiz. “Los estatutos están claros, sí alguien quiere presentarse que lo haga y qué los delegados decidan, lo demás son tonterías”. Las agrupaciones se están empezando a decantar y el “brindis al sol” de Ramón Ortiz gustó mucho sólo a “la cuadrilla” del ciezano. A los indecisos o no alineados lo les hizo precisamente mucha gracia.
La críticos estaban escocidos por la reunión de Alcantarilla. No es lógico que una reunión del secretario general con los máximos dirigentes de las agrupaciones locales margine a aquellos que se han significado en contra de su gestión. Ahí Saura pecó de sectarismo y rehuyó de la integración, según muchos dirigentes regionales. Dicen que fue una respuesta a la “Plataforma Alternativa” del segundo escalón.
Las asambleas locales de final de este mes irán colocando a cada uno en su sitio en cuanto a apoyos. Los “antisauristas” siguen sin encontrar cabeza de cartel. Pedro Saura y su equipo acumula apoyos regionales, porque con los de Madrid ya cuenta. A día de hoy Saura controla holgadamente el partido en Murcia y si no anuncia oficialmente la presentación de su candidatura a la reelección es por estrategia política.
La otra guerra en debate precongresual
La “plataforma” de pasado sábado está pagando los platos rotos de las guerras internas entre los socialistas murcianos de cara al congreso que se iniciara el 18 de julio. Los “retratados”, sin proyecto alternativo, sin líder de recambio a Pedro Saura, se han encontrado con padrinos putativos detrás de la maniobra. En el comité regional todos insistieron que lo suyo es iniciativa propia, que no eran avanzadilla de nadie.
“Yo no soy hombre de Ramón Ortiz, detrás de mi no está Alfonso Navarro”, era respuesta común. Entre los asistentes a la foto del hotel fuentes oficiales del partido informan que tres de los asistentes de Las Torre de Cotillas que se presentaron como concejales, son militantes de base, que ni siquiera iban en la pasada candidatura municipal.
Uno de los portavoces de la plataforma que piden el cambio de Saura como líder regional, es el secretario general de Cartagena-Norte y actual portavoz del grupo municipal socialista en el Ayuntamiento José Luis Martínez y está cuestionado por la agrupación más fuerte en militantes de la ciudad, Cartagena-Sur. Se han recogido más de seiscientas firmas de militantes pidiendo su dimisión.
Fuentes Zorita sigue y González Tovar espera
La continuidad de Fuentes Zorita al frente de la Confederación Hidrográfica del Segura es un uno fijo en todas las quinielas y se confirmará en próximos Consejos de Ministros. La plaza de la Delegación del Gobierno sigue abierta, las posibilidades de la continuidad de Ángel González dicen que son muy escasas. Por el contrario en las apuestas por Rafael González Tovar se cotizan al alza por días. El interesado dice no saber nada y se supone que si lo supiera tampoco lo diría.
Una agrupación de Cartagena ha apostado por María Antonia Matínez, “porque sería una gran delegada del Gobierno”. La ex presidenta de la Comunidad descarta volver a la primera línea de la política. Sigue el proceso congresual de su partido con interés, expresa su apoyo a Pedro Saura para la reeleción y está en contra de los intentos de volver a viejas historias pasadas del PSRM.
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