domingo, 6 de abril de 2008

Una nueva investigación demuestra el valor de las almendras en la salud cardiaca

LOS ÁNGELES.- Una investigación presentada en la reunión internacional de "Experimental Biology" proporciona una visión sobre por qué las almendras podrían ayudar a reducir los riesgos de padecer enfermedades cardíacas más allá de reducir el colesterol

Esta investigación resalta varias razones por las que las almendras, aparte de reducir el colesterol, desempeñan un papel integral en la salud cardiaca. La nueva investigación ha demostrado que incluso tienen el potencial para mejorar la salud intestinal, lo que indica que las almendras son un sencillo aperitivo que podría marcar una diferencia saludable.

Dos nuevos estudios proporcionan las pruebas que apoyan los efectos reductores del colesterol en las almendras. El primer estudio examinó los efectos a largo plazo del Portfolio Eating Plan, una aproximación dietética para reducir el colesterol que combina varios de los alimentos más sanos, como las almendras y la soja, en la misma dieta. Después de tres años, las personas que se sometieron al estudio (compatibilidad superior al 75%) redujeron su colesterol LDL, o nivel de colesterol "malo", en un 24% como media - lo que supone una reducción clínica considerable.

El segundo estudio evaluó el impacto de las almendras en solitario en referencia a los niveles de colesterol. Tras éste se descubrió que las personas que comieron un 20% de las calorías procedentes de almendras durante un periodo de 16 semanas redujeron sus niveles de colesterol LDL en un 9%, frente al 1% conseguido en la reducción de los que se sometieron a una dieta sin frutos secos. Además, los que comieron almendras aumentaron sus niveles de colesterol HDL, o colesterol "bueno".

"La ciencia sigue descubriendo los poderosos beneficios de la salud de los alimentos, y estos nuevos ensayos proporcionan una evidencia de la capacidad de las almendras para reducir el colesterol y disminuir del riesgo de padecer una enfermedad cardiaca", comentó el doctor Cyril Kendall, científico investigador de la University of Toronto.

"Otra investigación ha demostrado que las almendras podrían ayudar a mejorar el control del azúcar, reducir el daño por oxidación y descender los niveles de triglicéridos, todo ello contribuyendo al beneficio de la salud cardiaca".

El consumo de almendras se asocia a una menor posibilidad de padecer problemas cardíacos, y este efecto sobre el colesterol es sólo un dato parcial. Hay otros tres nuevos estudios que proporcionan datos sobre otros factores de probabilidad.

Las almendras podrían reducir la cantidad de insulina liberada por el organismo. Las investigaciones anteriores indican que las almendras podrían reducir los niveles de azúcar en sangre después de una comida. Un nuevo ensayo a largo plazo realizado por investigadores de la University of Toronto ha estudiado este fenómeno en profundidad. Las personas que comieron diariamente un aperitivo con almendras - entre 37 y 73 gramos - no produjeron tanta insulina como los sujetos que no tomaron almendras (la dosis recomendada de almendras es de 28 gramos).

Los antioxidantes de las almendras desempeñan un papel en la reducción del daño por oxidación. El colesterol oxidado LDL se sabe que aumenta el riesgo de padecer una cardiopatía. A pesar de ello, los ensayos indican que los antioxidantes de los alimentos, como las almendras, podrían ayudar a prevenir la oxidación LDL. Las almendras contienen niveles de antioxidantes (vitamina E y fenólicos) en cantidades similares a algunas frutas y verduras, y un estudio anterior ha demostrado que los antioxidantes de las almendras reducen la oxidación LDL.

Las nuevas investigaciones siguen apoyando este descubrimiento. Gracias a la utilización de los mismos sujetos del ensayo de insulina y la misma cantidad de almendras, los investigadores han descubierto que los sujetos que comen cada día un aperitivo de almendras reducen los marcadores de daño por oxidación.

La grasa de las almendras se libera de forma lenta. Los investigadores del King's College London en Reino Unido han estudiado la liberación de las grasas de las almendras, y más recientemente, cómo alimentarse de diversas formas de almendras produce cambios en los niveles de triglicéridos en sangre. El ensayo ha descubierto que una alimentación que contenga almendras reduce los niveles de triglicéridos de forma destacada, frente a una alimentación que carezca de ellas, lo que indica que la estructura de liberación de grasas en las almendras es lenta, causando un menor aumento de los niveles de triglicéridos.

Los probióticos se encuentran de forma natural en o añadidos a los alimentos, desplegando unas bacterias positivas para el intestino. Los prebióticos, por otro lado, son partes no digeribles de los alimentos procedentes de plantas. Pero gracias a las bacterias del intestino, incluyendo las de los probióticos, ayudan al organismo a digerir estos compuestos. Cuando lo consiguen, se produce la liberación de otras sustancias sanas que ayudan a contribuir a fortalecer el sistema inmune y un intestino más sano a nivel general.

Los investigadores del Institute of Food Research en Norwich han realizado pruebas de los efectos prebióticos de varias formas diferentes de almendras (de alta calidad, desgrasadas y almendras puras sin tratar). Todas las formas, excepto las desgrasadas, demostraron efectos prebióticos. Cuando se las comparó con los fructooligosacáridos, los prebióticos incluidos en algunas frutas y verduras, los efectos prebióticos de las almendras fueron similares.

La recomendación de tomar almendras (en torno a un puñado, unas 23 almendras) es una excelente fuente de vitamina E y magnesio, y ofrece proteínas, fibra, grasas monosaturadas sanas, potasio, calcio, fósforo y hierro.

Los amos del Mundo y el muy relativo poder de Valcárcel

La crisis del PP / Fermín Bocos

Mientras Zapatero en Bucarest nos dejaba la impagable foto-carné de lo que es y pesa en éstos días la política exterior de España, Madrid recuperaba el aire de las postrimeras del reinado de Isabel II.

En el solar de la derecha, todo son rumores y conspiraciones; los restaurantes están a tope. Todo son rumores y en todos se habla de Mariano Rajoy y de Esperanza Aguirre. En Madrid, gobierna la derecha (Esperanza Aguirre, mayoría absoluta) y en Madrid vive, pero sin gobierno, Mariano Rajoy, líder de un partido que ha mejorado en número de votos pero que ha perdido por segunda vez las elecciones.

Y, ése es el problema. Porque quien salió para La Moncloa se ha quedado en Génova y pretende una tercera oportunidad; oportunidad que no todos en su partido parecen dispuestos a respaldar. Así que en cuanto Rajoy designó tripulación parlamentaria para otros cuatro años de oposición, empezaron las conspiraciones. El PP tiene un congreso en el mes de junio al que Rajoy pretende llegar sin contrincantes. Hace dos semanas parecía posible, hoy resulta más que improbable. Rajoy se ha rodeado de afines –en su mayoría alevines-, dejando en el escaño, sin tarea ni focos, a los pesos pesados que la gente conoce.

Algunos se han resignado, otros no. Una cena entre Rajoy y Aguirre se ha explicado de manera que sirve tanto para dar pie al anuncio de una guerra como a la notificación de una tregua. Se habla de lista alternativa a Rajoy en el congreso de junio y también del cabreo que tiene Camps porque a González Pons Rajoy le ha dejado a la luna de Valencia. Tampoco están contentos en Cataluña, ni en Castilla-León, donde han ganado de calle pero no se lo reconocen. Ya digo, Madrid es un rumor y Rajoy cada vez recuerda más al Almunia de cuando Borrell saltó al ruedo y ganó las primarias.

Presidente de Cajamar: " Un 23% del negocio lo tenemos en Murcia y el 14% de cuota"

MURCIA.- El presidente de "Cajamar", Antonio Pérez Lao, dice hoy en "La Verdad", entre otras cosas, que la entidad ha experimentado un crecimiento espectacular en la Región de Murcia. En los últimos siete años su volumen de negocio ha crecido un 420% y se ha convertido en la segunda entidad financiera en número de oficinas. Incluso posee más oficinas que en Almería, provincia en la que nació hace más de 40 años y en la que medró al ritmo del boom de la agricultura de invernadero.

Licenciado en Derecho, Pérez Lao ingresó en la Caja Rural de Almería en 1971, primero como empleado, para después ir escalando puestos como directivo hasta llegar al Consejo Rector. Es presidente de la entidad desde marzo del 2006. También ha sido presidente del Grupo Hispatec y de Agrocolor, vicepresidente del Parque de Innovación y Tecnología de Almería y de la Corporación Tecnológica de Andalucía.

- Hay muchas afinidades entre Murcia y Almería, además de la proximidad geográfica, pero quizás la relación sea escasa.

- La relación comercial con Murcia siempre ha sido muy fuerte. Los exportadores murcianos eran los que vendían los productos almerienses, y eso todavía sigue. Es cierto que existe un sentimiento común, pero al pertenecer a dos comunidades autónomas diferentes cada uno enfoca su problemas y necesidades a través de su propia comunidad. El sentimiento y el problema del sureste es el mismo, y me refiero no sólo a Almería y Murcia, sino también a las provincias de Albacete y Alicante, sobre todo por lo que respecta al agua, por eso sería bueno potenciar la unión para reivindicar soluciones, porque eso además no va en detrimento de la permanencia a una u otra comunidad autónoma.

- ¿Hay capacidad para seguir creciendo en Murcia?

- La capacidad de expansión está en el límite de los recursos de esa provincia. En Murcia está nuestra primera red de oficinas; tenemos más sucursales incluso que en Almería, aunque en Almería la cuota de mercado lógicamente es mayor, alrededor del 50%, mientras que en Murcia está en el 14%. Es decir, tenemos margen para seguir creciendo. Creemos que podemos llegar a un 20% de la cuota de mercado en un tiempo prudencial y abrir entre 8 y 10 oficinas más. En siete años, hemos crecido un 420% en Murcia, y del negocio general de Cajamar, un 23% está en Murcia.

- ¿Cómo está afectando a la entidad la desaceleración económica y la crisis en el sector inmobiliario?

- Por nuestra particularidad de entidad enfocada hacia la actividad agroalimentaria nos afecta menos la crisis inmobiliario. Pero es cierto que cuando llueve todos nos mojamos y cuando hace sol todos nos calentamos. Es un problema general y también tenemos nuestra participación en el sector inmobiliario, que puede estar en algo más del 20%, aunque sin grandes participaciones. Nos puede afectar algo, pero es perfectamente asumible.

En lo que respecta a la financiación de la vivienda, que nosotros consideramos como economía familiar, vamos a seguir igual, aunque nos preocupa que se reduzca la construcción y aumente el desempleo, porque eso se traducirá en un aumento de la morosidad, algo que, de hecho, ya se está empezando a notar.

- ¿Cree que la situación se va a agravar a corto plazo?

- En este caso han coincidido dos fenómenos: la crisis inmobiliaria y la crisis financiera. En España, había cierta dependencia de la financiación exterior, y cuando surge el problema de las hipotecas basura estadounidenses se crea una desconfianza en el sistema financiero y la financiación exterior disminuye. Pero el sistema financiero de España es de los más sólidos porque ha habido un control exhaustivo del Banco de España. No hay motivo para la desconfianza que se ha generado en otros países.

- A ustedes les salpicó la crisis de las hipotecas basura.

- Muy poco, fue un porcentaje mínimo.

- ¿Cajamar ha adoptado alguna medida específica para hacer frente a la desaceleración económica?

- Nosotros seguimos atendiendo a nuestros clientes habituales en todos los sectores, incluido en el inmobiliario. En una situación de estas, a lo mejor se mira más la garantía, la seguridad, pero decisiones drásticas no hemos adoptado ninguna.

_ ¿Ha bajado mucho la concesión créditos hipotecarios?

- Sí, ha bajado mucho. Primero, porque también ha bajado la demanda. En la actual situación, hay un componente psicológico importante. Mucha gente piensa que puede comprar más barato y espera. Además han subido un poco los tipos de interés y eso influye en la disminución de la demanda crediticia.

- ¿A qué achaca los rumores, los bulos, las maledicencias que se han extendido sobre una posible crisis de liquidez en algunas entidades financieras?

- Dificultades existen en todas las entidades, porque la capacidad que había de recurrir a los mercados extranjeros, al surgir la desconfianza por la crisis financiera, se ha limitado. Las entidades deben centrarse ahora en la fuente del ahorro de sus propios clientes, pero hay que reconocer que uno de los males de la economía española es que consumimos demasiado y hay poco ahorro, por eso había que recurrir al extranjero. Esa situación es general. Pero la desconfianza es infundada, porque las garantías y solvencias del sistema financiero español son enormes. Nuestro coeficiente de garantía, por ejemplo, es de casi el 200% respecto a las garantías que exige el Banco de España, y no es una excepción; es algo general en las entidades financieras españolas. Creo que esa desconfianza en cuatro o seis meses se va a solventar.

- Por la especial vinculación con el sector agrario, ¿la sequía y los perjuicios que ha causado en el sector los han notado en la cuenta de resultados?

- Claro que se nota si hay un mayor coste del agua o un menor rendimiento. La sequía es un problema básico para todo el sureste, pero sobre todo para Murcia y Almería, y es un problema que nos preocupa enormemente y en cuya solución no regateamos esfuerzos. En nuestros trabajos de experimentación, una de las actividades principales es la investigación del ahorro del agua, porque en Murcia y Almería el esfuerzo que se hace por aumentar el valor de una gota de agua es increíble. En ningún sitio se valora una gota de agua como aquí. Incluso, el anterior presidente de la caja, en vez don Juan del Águila, era don Juan del Agua, porque para él era crucial el agua.