domingo, 12 de mayo de 2013

El cierre de la librería 'Escarabajal' demuestra lo que ha dejado de ser Cartagena asolada por varias crisis


CARTAGENA.- El cierre de la legendaria librería 'Escarabajal' después de 125 años abierta al público en la calle Mayor,  demuestra lo que ha dejado de ser Cartagena como consecuencia de las sucesivas crisis vividas por la ciudad desde los años 90 a causa del desmantelamiento industrial y militar, a costa de una mayor centralización comercial en la ciudad de Murcia, y la apertura de 'El Corte Inglés' en la Alameda de San Antón.

Con unas deudas de 1,5 millones de euros con proveedores y trabajadores, la librería-papelería entró finalmente en concurso voluntario de acreedores el pasado año por no poder hacer frente a los pagos pendientes.
 En noviembre, su actual propietaria, Ana Escarabajal García-Pagán, también presentó suspensión de pagos como persona física tras hipotecar los bienes de la familia, creando unas situaciones de insolvencia que ahora hacen inviable este negocio fundado en 1888 por su abuelo Horacio y regentado después por Enrique, su padre, siendo hasta este momento la segunda librería abierta más antigua de España.
A partir de la crisis industrial y militar de los años 90, 'Escarabajal' era una librería quizá sobredimensionada para una ciudad tan en baja como Cartagena.
Ya en el verano de 2011 cerró su primera planta, la de libros técnicos y papelería, forzada por las deudas, para reducir a continuación la plantilla de quince a sólo dos empleados. 'Escarabajal' intentó así ser rentable siendo mucho más pequeña.
Y los trabajadores despedidos demandaron a la empresa por los impagos de nóminas de hasta año y medio desde 2009 pese a tener una facturación anual de 1,3 millones de euros. Acusan a la propietaria de ser la responsable de la deuda que acumula este mítico establecimiento de Cartagena por una mala gestión de Ana.
Desde 2008 ha ido bajando el porcentaje de ventas, acumulando casi un 60% hasta hoy. Y no han resultado rentables las innumerables presentaciones y eventos, excepto una de cada diez, promovidos por esta heredera de la saga de libreros.
El administrador concursal que ha dirigido la liquidación de esta razón social es el abogado Francisco Díaz Pinar por designación del Juzgado de lo Mercantil nº 2, de Murcia, ante el que se presentó concurso voluntario de acreedores el pasado mes de diciembre.