MURCIA.- El director general de Industria
Agroalimentaria y Capacitación Agraria, Ángel García Lidón, destacó "la
importancia que tiene para el sector agroalimentario el cambio
generacional en las explotaciones", con motivo de su reciente visita al
municipio de Águilas.
García Lidón visitó la localidad para conocer sobre el terreno los
programas de modernización de explotaciones y de incorporación de
jóvenes agricultores que se están desarrollando en los parajes de Marina
de Cope y Venta de San Felipe, según han informado fuentes del Gobierno
regional en un comunicado.
Para el apoyo de estas medidas, la Consejería de Agricultura y
Agua estableció una Orden de Ayudas, financiadas por la Unión Europea,
dotada con 11 millones de euros para la incorporación de jóvenes
agricultores y 24 millones para los programas de modernización de
explotaciones.
De este modo, anunció que "está prevista otra concesión cercana a
los siete millones de euros, que también facilitará la incorporación de
la población juvenil al sistema agrario". En este sentido, apuntó que
"este sector demanda una gran cantidad de mano de obra cualificada, que
puede ser atendida por este segmento de la población".
Asimismo, alabó la iniciativa de los agricultores de la zona de
Águilas, "que han sido pioneros en la implantación de las nuevas
técnicas de control biológico", así como su inquietud por "buscar
sistemas de producción, especies y variedades destinadas a la
exportación". Prueba de ello es la introducción en este municipio de
variedades de uva de mesa sin pepita con sabores a kiwi o frambuesa.
Acompañado por el concejal de Agricultura del Ayuntamiento de
Águilas y por miembros de la organización profesional Asaja, visitó
diversas zonas productoras de tomate para comprobar sobre el terreno la
implantación de técnicas de lucha biológica y de desinfección no química
de los suelos de los invernaderos, para el posterior trasplante y
liberación de insectos útiles que controlen las principales plagas que
afectan a este cultivo.
El responsable autonómico señaló que "la técnica de la
solarización resulta primordial para el buen desarrollo de este cultivo,
dada la carencia de productos químicos desinfectantes que hay
registrados actualmente".
Consiste en tapar el suelo con un film plástico inmediatamente
después de dar un riego. De esta forma se produce un incremento
considerable de la temperatura del suelo, que provoca una serie de
vapores y elementos de descomposición, que propician su desinfección.
Finalmente, agradeció al responsable municipal de Agricultura su
contribución en la búsqueda de soluciones a los problemas que se
plantean en el cultivo del tomate, tales como la aparición de nuevas
patologías y las crisis de precios que han afectado en las dos últimas
campañas