viernes, 16 de diciembre de 2016

Sánchez Carrillo y Guerra participaron en cacerías en Sudáfrica y Tailandia

MURCIA.- El que fuera concejal del ayuntamiento de Murcia, Antonio Sánchez Carrillo, estuvo de cacería en Sudáfrica en junio de 2009 y mayo de 2010, acompañado, en esta segunda ocasión, del exgerente de Urbanismo, Alberto Guerra.

Asi se refleja en el informe que la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil (UCO) ha entregado en el Juzgado de Instrucción que investiga el caso Umbra, de presunta corrupción urbanística en la expansión norte de la ciudad.
En el primer viaje, que salió del aeropuerto de Barajas el 21 de junio de 2009, viajaba, con Sánchez Carrillo, Daniel Aurelio Valenzuela, asesor jurídico del promotor inmobiliario Ramón Salvador Águeda.
En el segundo vuelo, que partió del mismo aeropuerto el seis de mayo de 2010, viajaron los dos anteriores y, también, Guerra.
Finalmente, dice el informe de la Benemérita, hay un tercer vuelo, en este caso, a Bangkok (Tailandia) en el que los excursionistas son los ya citados Alberto Guerra y Daniel Aurelio Valenzuela.
En el auto judicial del que se ha derivado la emisión de este informe se ordenaba a la UCO que practicase las gestiones oportunas para determinar quién pudo pagar esos viajes, realizados para participar en cacerías, y la apuntaba el nombre de una empresa que suele gestionar este tipo de desplazamientos.
Sin embargo, esa vía ha resultado infructuosa porque, como se dice en el informe, la misma ha contestado que entre sus clientes no figura ninguno de estos nombres.
Todo esto forma parte de las investigaciones derivadas de la pieza separada del caso Umbra, en la que también se investiga el viaje a Estambul en el que participó el exalcalde Cámara, que, presuntamente, pagó una empresa del constructor Águeda.
Una de las empresas de Ramón Salvador Águeda, Mirallevant, es una de las que entró en el convenio urbanístico que el Ayuntamiento firmó en la zona norte y que permitió la remodelación del Teatro Circo, y que ha sido investigada en el caso Umbra. Precisamente, ese viaje se realizó dos meses antes de que se aprobara definitivamente el plan parcial de Cabezo de Torres, del convenio del Teatro Circo.

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