MURCIA.- Ahora Murcia advierte de que no corresponde al Ayuntamiento sufragar la
rehabilitación del Molino del Amor ni de la Torre Islámica próxima al
Molino del Batán, ya que según la Ley de Patrimonio Cultural los
propietarios de estos bienes deberían haberlos entregado en perfecto
estado al Consistorio, al pasar a manos de éste por estar incluidos
dentro de sendos planes urbanísticos.
Por ello, la formación municipal
exige al Ayuntamiento que proceda a demandar a los anteriores
propietarios que costeen la rehabilitación, tal y como deberían haber
hecho antes de transmitir los inmuebles a la administración. "Solo en el
caso de que los anteriores propietarios se nieguen a rehabilitarlos",
explica Angeles Micol, "el Ayuntamiento debería hacerlo, de forma
subsidiaria, ejecutando el aval bancario que los promotores debieron
haber depositado y exigiendo el resto a través de los mecanismos legales
establecidos en la Ley".
Desde Ahora Murcia se afirma que si el Ayuntamiento paga la
rehabilitación del Molino del Amor o de la Torre Islámica "nos
encontraríamos en una situación muy grave, ya que estaría descargando de
sus obligaciones a los promotores para cargarlas al erario público. Ya
vale de beneficiar a promotores y empresas a costa del bolsillo de todos
los murcianos. Y el colmo es que nos venden como una buena acción el
realizar una rehabilitación que no les corresponde hacer". Ante esta
situación, si el Ayuntamiento no pone los medios para que evitar este
pago desde las arcas públicas, "en Ahora Murcia iremos a los
tribunales".
En un escrito dirigido al Ayuntamiento, la formación municipal ha
pedido, además de que se exija la rehabilitación del Molino del Amor y
la Torre Islámica a los anteriores propietarios, que se anule la
aprobación de aplicaciones presupuestarias de gasto de dinero público
para estas rehabilitaciones. También ha solicitado que se investigue la
responsabilidad de los funcionarios encargados de la recepción del
Molino del Amor y la Torre Islámica en las condiciones en que fueron
aceptados para pasar a formar parte del inventario de bienes
municipales, así como las de sus superiores jerárquicos y los cargos
políticos responsables de las concejalías intervinientes.
El pasado 22 de septiembre el Ayuntamiento de Murcia, a través de la
Concejalía de Urbanismo, Medio Ambiente y Huerta, presentó los proyectos
de rehabilitación del Molino del Amor y del entorno del Batán, en
Zarandona, que forman parte de las actuaciones del llamado Plan de
Acción de la Huerta de Murcia. Se anunció entonces que se destinarían
260.150 euros a ambas actuaciones, 169.400 euros a la recuperación del
entorno del Batán y 90.750 euros para la rehabilitación integral del
Molino del Amor, aunque las memorias valoradas para estas actuaciones,
según ha podido comprobar Ahora Murcia, preveían 179.507,54 euros y
310.291,60 euros, respectivamente, con un plazo de 12 meses en ambos
casos.
La concejala explica que "el Molino del Amor está incluido dentro del
ámbito del Plan Especial PC-Al1, que obtuvo la aprobación definitiva de
su Proyecto de Reparcelación el 29 de julio de 2009 por acuerdo de la
Junta de Gobierno (publicado en el BORM de 6 de mayo de 2010). Desde esa
fecha está integrado en el Inventario de Bienes del Ayuntamiento de
Murcia como bien demanial de servicio público".
Micol señala que "la recuperación del Molino del Amor corresponde al
promotor del Plan Especial PC-Al1, que es quien entregó el bien a la
administración como parte del pago para el desarrollo de dicho plan, y
tenía la obligación de transmitir el edificio protegido ya rehabilitado.
El Ayuntamiento, antes de recibir el elemento catalogado, debió haber
exigido al propietario, incluido en la Junta de Compensación de Plan
Especial, su entrega en perfecto estado. Al no haber cumplido el
Ayuntamiento con su obligación, resulta que ahora tenemos en el
inventario un bien que la Ley obliga a rehabilitar y tener en perfectas
condiciones".
La edil especifica que "en caso de que el anterior propietario se
niegue a rehabilitar el inmueble, pese a estar obligado por la Ley de
Patrimonio Cultural, el Ayuntamiento debería hacerlo, de forma
subsidiaria, ejecutando el aval bancario de 45.139 euros que los
promotores debieron haber depositado una vez aprobado el Plan PC-Al1, y
exigiendo el resto a través de los mecanismos legales establecidos en la
Ley".
Algo similar ocurre con la Torre Islámica, que es un BIC (Bien de
Interés Cultural), y que se encuentra en el ámbito del Plan Parcial
ZM-Zn3, en concreto dentro de su Unidad de Actuación VII cuyo Proyecto
de Reparcelación fue aprobado en 2007. "Por lo tanto", afirma, "era
obligación de los propietarios de la Junta de Compensación de la Unidad
de Actuación VII haber mantenido el BIC en perfecto estado de
conservación, de acuerdo a las leyes de Patrimonio Cultural, y también
era obligación del Ayuntamiento haber exigido el cumplimiento de esa
obligación a dichos propietarios antes de haber recepcionado el bien. Lo
que procede en este caso es que el Ayuntamiento exija a la Junta de
Compensación que efectúe la rehabilitación del BIC, y en caso contrario
que lo lleve a cabo de forma subsidiaria con cargo a la ejecución del
aval bancario que debe existir y con cargo a la Junta de Compensación de
la Unidad de Actuación VII del Plan Parcial ZM-Zn3".