viernes, 3 de marzo de 2017

En todos los pueblos hay un tonto / Apunte de Argárico *

En todos los pueblos suele haber un tonto al menos, el consabido tonto oficial del pueblo, y Puerto Lumbreras, Murcia, no podía ser menos. Allí tenía en tiempos un apodo: El Cebollino, aunque creo que se llamaba Sánchez López de apellido. Un día, un vivo de Murcia, vecino del barrio de Santa Eulalia, con ayuda de su sobrino del mismo barrio, se fijo en él para hacer otra de las suyas. Y no se equivocó en su elección porque el tonto era tan tonto y fantasioso por fatuo, que aparecía como víctima propiciatoria a cambio de prometerle quimeras políticas por su inestimable colaboración, discreción  y silencio. Fué el mejor que encontró en toda la Región.

Este es el relato claro que hace apenas 72 horas me ha hecho un destacado vecino del lugar, hoy residente fuera de la localidad, que me asegura que el presidente de la Comunidad Autónoma de Murcia, ya por poco tiempo  -aunque pronto regional de su partido y con sueldo además- sólo hizo de sujeto pasivo de la gran chorizada del auditorio lumbrerense que persigue con ahínco la jueza de Lorca, Consuelo Andreo, con el rastreo policial de parte de la cantidad de una subvención europea que supuestamente acabó en cajas y bolsillos ajenos a la del Ayuntamiento de Puerto Lumbreras siendo alcalde y jefe local nuestro particular ecce homo.

Estoy seguro que PAS es inocente de gran parte de lo que le acusa la Fiscalía del TSJ de Murcia porque personalmente no se llevó un duro aunque, a cambio, recibiese una recompensa en privilegios y por eso pienso que el magistrado instructor, su viejo amigo Pérez-Templado, lo debe tratar mejor de entrada como testigo que como imputado-investigado al menos que, a tenor de los autos, lo considere presunto cómplice de la jugada que, evidentemente, lo fue como colaborador necesario si es que la hubo. Así que quien debiera comparecer el próximo lunes, además de PAS y los tres fiscales que se esperan, debieran ser Valcárcel, Gómez Fayrén (?), Pedro Alberto Cruz y el juez De la Mata, que lleva en la Audiencia Nacional la reapertura del caso de la financiación irregular del PP.

No ha sido, pues, tan extemporáneo Albert Rivera al interpretar la resistencia de Rajoy y Maillo a cortar la cabeza a PAS en primera fase aunque esté previsto finalmente su dimisión para quedar, de momento, al frente del PPRM por su sacrificio mientras un diputado regional de su partido le releva en San Esteban con apoyo de C's en la Asamblea Regional. Porque Pérez-Templado - confiemos en que el lunes llegue sereno a su despacho como sugiere su apellido después de tanta presión para olvidar sin caer- no va a poder exonerarlo de cierta culpa y tendrá que sentarlo en el banquillo después de que este pequeño escándalo regional atraiga la semana que viene a Murcia a gran parte de la prensa nacional e, incluso, alguna europea por las derivaciones de cierto calado que este caso pudiera engendrar.

Porque, ¿qué pasaría si apareciese involucrado en primera instancia, en esta ya famosa cleptomanía, un vicepresidente actual del Parlamento Europeo como receptor del tributo de PAS a unos y a otros de aquí y de allá? Ya tendríamos en marcha al Tribunal Supremo español y un cambio de escala del 'caso Auditorio' aunque haga muchos meses que la OLAF (Oficina Europea Antifraude) con sede en Bruselas mandó a la Región de Murcia a sus especialistas en estas cosas tan propias de la ribera mediterránea de la Unión Europea y se llevaron un criterio claro después de diversas entrevistas en Murcia, Alicante y Madrid con ilustres ciudadanos para nada sospechosos de no estar por la regeración de la cosa pública murciana.

Así que Albert Rivera se saldrá con la suya, sabiendo lo que sabe,  forzando hasta el límite a Rajoy sin que parezca al final lo que realmente es. Por eso el gran arquitecto del 'caso Auditorio' será el gran culpable de haber hecho perder la inocencia política a PAS, ahora obligado a la reclusión entre los muros del PPRM, a dejar la mansión de La Ladera (creo paga su renta mensual un tal don Tomás desde un pueblo a 33 kilómetros de la capital) y, puede, que hasta su escaño en la Asamblea Regional aunque su partido siga en San Esteban con otro figurante más de la serie histórica que venimos padeciendo los murcianos con uno u otro partido, desde Hernández Ros-María Antonia hasta Valcárcel-Garre, no sé a cual más inepto aunque tenga muy claro quien de todos era y es el más mangante.

Me viene a la memoria aquella película de Pedro Lazaga en 1959, Los tramposos, por lo del 'timo de la estampita'.  Porque no otra cosa sucedió en 2011 en Puerto Lumbreras aunque con un reparto de actores más conocido por los ciudadanos de la Región de Murcia pero el mismo 'modus operandi'. Los grandes estafados, los no ya tan despistados contribuyentes europeos, y los sujetos desaprensivos, posiblemente políticos locales sin escrúpulos haciendo méritos llevando dinero ajeno a Génova 13 a cambio de protección política permanente e indefinida, según la fórmula perfeccionada en su día por el cartagenero Eduardo Zaplana desde Benidorm y luego experimentada de forma clónica con mucho celo en Baleares, Murcia y Comunidad Valenciana sin olvidar Madrid región.

¿Qué podía hacer ante el destape mediático del tema el ministro de Justicia, señor Catalá? Pues lo que ha hecho: intentar salvar la situación tratando de cortar el cuello a la hidra fundamentalista por rigorista que anida en la Fiscalía del TSJ de la Región de Murcia para que no insistiera tanto en la acusación a PAS, el menos culpable de los más culpables presuntos en el 'caso Auditorio'. Porque no sería justo del todo que se comiera el marrón él solito entre los políticos en danza y, encima, sin lucrarse directamente con el hurto.

Y por eso buscó el ministro un fiscal general mucho más compresivo que su antecesora Madrigal y de largo recorrido como magistrado de lo penal en el Tribunal Supremo al objeto de atajar técnicamente como jurista acreditado la deriva errónea, llamando incluso a la disciplina que es la esencia de todo cuerpo jerárquico, en el otro sumario que el pintoresco juez Velasco ha ido desarrollando en torno a la 'trama Púnica' y en el que implica a PAS en grado de tentativa aunque la última reforma del Código Penal haya desactivado el tipo en cuestiones de corrupción política cuando se da ausencia de perjuicio efectivo a las arcas públicas al no consumarse la malversación de fondos públicos aunque PAS tuviese en mente hacerlo o no, algo que resulta ahora totalmente inexcrutable.

Y un saqueo y no otra cosa es lo que está sucediendo también aquí con el tema del agua potable para financiar partidos politicos, en plural (igual con los servicios de recogida de basuras), y no sólo financiando eventuales independencias soberanas y lejanas, dentro de un latrocinio institucionalizado y que ahora comienza a aflorar con la correspondiente respuesta ciudadana, tal que la del próximo domingo en Murcia con la convocatoria de protesta y testimonio de la Plataforma contra la Corrupción. Pero eso ya será objeto de atención la próxima vez.


(*) Pseudónimo de un veterano periodista murciano no residente

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Argárico, eres un crack.
Es una pena que no te prodigues más.

Anónimo dijo...

Argárico, "Auditorio - Duplex - Arquitecto".