lunes, 24 de julio de 2017

La trama Gürtel atrapa ya al presidente del Gobierno / José Hervás *

Va a ser una se­mana de claro en­fren­ta­miento entre el Partido Popular y el Partido Socialista. El PSOE ha en­viado du­rante todo el fin de se­mana claros men­sajes de que va a hacer un duro mar­caje a los po­pu­lares desde ahora hasta que lle­guen las pró­ximas elec­cio­nes, pese a que to­davía quedan casi dos años para las eu­ro­peas y au­to­nó­micas y lo­ca­les. 

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez discrepa de la última medida del Gobierno para controlar que el Gobierno de la Generalitat no destine ningún recurso de los presupuestos a la convocatoria del referéndum prevista para el 1 de octubre. Insiste en que el Ejecutivo de Mariano Rajoy lo que tiene que hacer, en lugar de pasar a controlar semanalmente el destino de los recursos del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) es abrir vías de diálogo para evitar lo que ya se da por hecho que será un choque de trenes en las próximas semanas o meses entre el Gobierno Central y la Generalitat.

Pero el PSOE quiere sobre todo aprovechar la oportunidad que le brinda este miércoles para agudizar su labor de oposición de cara a la opinión pública. Será cuando finalmente declare el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en el juicio a la primera época del caso Gürtel, la que discurre entre 1999 y 2005, una de las diez piezas abiertas en el caso de la presunta financiación ilegal del Partido Popular.

Esta comparecencia pasa a convertirse en la fundamental de las diez piezas que permanecen abiertas del caso, por las que hay 37 acusados vinculados con el Partido Popular y en la que figuran más de 300 testigos. Sin duda la más importante de todas ellas es la del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, porque pasa así a ser el primer presidente en ejercicio de la democracia que tiene que declarar en un juicio, si bien lo hace en calidad de testigo.

Ya han tenido que declarar lo más granado del equipo de Gobierno del expresidente José María Aznar como son Rodrigo Rato, Francisco Álvarez Cascos, Ángel Acebes, Mayor Oreja, Esperanza Aguirre o Javier Arenas.

Los populares recuerdan que Rajoy tendrá que declarar a petición de una acusación popular, la Asociación de Abogados Demócratas por Europa (Adade) cuyos componentes están muy vinculados con el exjuez suspendido en sus funciones por el Tribunal Supremo, Baltasar Garzón. La comparecencia, como bien deja claro el tribunal en su citación, no la hace como presidente del Gobierno sino como ciudadano español.

También explican los magistrados del caso Gürtel que la presencia física de Rajoy en la sala que la Audiencia Nacional tiene en la localidad madrileña de San Fernando de Henares donde se celebra el juicio, garantiza la "inmediación y la contradicción" entre las diversas partes para que el tribunal pueda decidir con mayor conocimiento de causa.

Se trata de conocer lo que Rajoy sabe de las adjudicaciones a empresas de la trama Gürtel cuando era vicesecretario general del partido y responsable de asuntos electorales entre 1990 y 2003. Conviene insistir que esta pieza de la primera parte del caso Gürtel analiza lo sucedido entre 1999 y 2005. Durante cinco años de este período, Rajoy fue vicesecretario general del partido.

Existe la incógnita de lo que el presidente del Tribunal permita preguntar al presidente del Gobierno. Como se recordará, Ángel Hurtado, presidente de la sala, se opuso a que se convocara como testigo a Rajoy frente a los otros dos magistrados, Julio de Diego, redactor del auto, y José Ricardo de Prada, que apostaron a favor.

Este juicio es a la actividad de la trama Gürtel de 1999 a 2005, no sobre los conocidos como papeles de Bárcenas de la contabilidad ‘B’ del PP, que se tratan en una causa aparte. Pero la fiscal y las acusaciones han preguntado a los testigos por esos documentos, ante la protesta de los abogados defensores.

Se da por hecho que también preguntarán a Rajoy por los papeles de Bárcenas, o lo que es lo mismo, la que se conoce como contabilidad paralela del partido. ¿Qué permitirá el presidente del tribunal, Ángel Hurtado, que se haga? La controversia está servida.

Pero los populares consideran que ellos también cuentan con armas para desgatar al principal partido de la oposición. Un día antes de que se produzca la declaración del presidente del Gobierno está convocado a comparecer en la comisión de investigación sobre la crisis de las cajas en el Congreso quien fuera Gobernador del Banco de España durante la época del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero en la que se desencadenó la mayor crisis financiera que hayamos conocido, Jaime Caruana.

Los populares están muy pendientes de las explicaciones que pueda dar este hombre de lo que hizo con la carta de los inspectores del Banco de España en la que le alertaban de las semillas de la crisis para que urgiera la actuación del vicepresidente económico del Gobierno, Pedro Solbes, que no tomó las decisiones necesarias.

Además, él personalmente pudo hacer algo más de lo que hizo. El crédito durante los 7 años de su mandato creció un 170 %, un 18 % de media anual. Allí se incubó la burbuja crediticia. Como tan acertadamente ha descrito Miguel Sebastián en su libro `La falsa bonanza´ nos creíamos los amos del mundo comprando empresas no con nuestro ahorro sino a crédito.

Sebastián también relata una reunión seguida de almuerzo de esa ápoca, a finales de 2003 en la que los principales altos cargos del Banco de España negaron que se fuera a producir el peligro que finalmente llevó a la economía española a la mayor crisis de su historia. El Gobernador era Caruana. Algo podrá decir el martes.



(*) Periodista

No hay comentarios: